Ante el importante giro que está tomando nuestra sociedad, después de adaptar la formación y re-educarnos, des-aprender, adaptando nuestros conocimientos, nuestra persona, y nuestra vida a los nuevos sistemas que se nos avecinan, ¿por qué no dar el paso decisivo?, la puerta se ha abierto, tú eres el responsable de pasarla o quedarte en el umbral, de avanzar o estancarte en el pasado…¿qué se nos ofrece al final?, ¿qué nos quieren decir las noticias diarias en prensa, radio, televisión, debates, empresas que cierran, puestos que desaparecen?…ya lo decía el cantante del grupo Macaco en su canción:“gira que gira la vida y a veces…se tuerce”, en nosotros está tomar este giro como negativo o adaptarnos a los tiempos y salir triunfantes de estas nuevas situaciones.
La cooperación entre sectores, entre lo público y lo privado, la internalización de las empresas, el teletrabajo, son salidas más que estudiadas ya por empresarios para salir de la crisis, y esto supone nuevos perfiles de trabajadores adaptados a estas necesidades, por lo tanto, la estrategia se centra en qué puede ofrecer ese candidato para ayudar a la compañía a alcanzar sus objetivos. Uno de los problemas actuales que se plantean las empresas es la dificultad para encontrar determinados perfiles (personas preparadas para salir al exterior, con dominio de las herramientas tecnológicas, con fuertes habilidades y competencias en el desarrollo multidisciplinar), por eso, la tendencia actual es un cambio en los departamentos de seleeción de personal y recursos humanos que han pasado de las tareas de reclutamiento y procesos de selección a una función más enriquecida y alineada con la estrategia que va desde el reclutamiento a la fidelización, pasando por la retribución, la comunicación interna, el desarrollo de la trayectoria profesional, el coaching, la formación, la evaluación del desempeño, etcétera. Hoy en día las empresas apuestan por las habilidades del candidato que le ayuden a alcanzar metas a mediano y largo plazo. Las nuevas estrategias en Recursos Humanos deben enfocarse en atraer talento con base en competencias, más que en funciones; y en crear esquemas de compensaciones más atractivos que sean capaces de retener al personal.
Actualmente, las compañías que quieran conservar al talento tienen que tomar la responsabilidad de otorgar compensaciones adecuadas y dar mayor capacitación, o de lo contrario correrán el riesgo de desaparecer. Entre algunas de estas compensaciones están el sueldo base, bonos, fondo de ahorro, vales de despensa, acciones de la empresa, comisiones, automóvil, reparto de utilidades, planes de retiro, seguros de vida y médicos, el teletrabajo, entre otros. Destaquemos un poco más este último punto, actualmente 10 millones de europeos “teletrabajan” según el Status Report on European Telework de la Comisión Europea, lo que viene a representar el 6% del total de la fuerza de trabajo.
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