El amor nos brinda al oportunidad de vivir una evolución y transformación como personas en positivo, amar es un intercambio mutuo que nos debe ayudar a evolucionar, a crecer, incluso descubrir nuevas facetas de nosotros mismos, porque el otro nos debe potenciar no mermar jamás, el amor te tiene que sacar tu verdadero yo, pero con más fuerza si cabe para mejorar, para emprender cambios, y seguir creciendo juntos porque compartir la vida junto a otra persona es dejar que ésta nos descubra muchas cosas, y viceversa, aportar al otro cualidades y actitudes que permitan la oportunidad de desarrollo personal, de mejorar y descubrir distintos aspectos de nosotros mismos. Que bonito es vivir en pareja y saber que tienes a alguien al lado que te apoya que persigue tus metas porque son las suyas también, que nos quiere y adora con nuestras virtudes y nuestros defectos, que está ahí en los malos momentos, que te ayuda a superarte y quitarte miedos, es decir que también te ayuda a construirte porque amar nos hace bascular en nuestra identidad profunda sin renunciar a ser nosotros mismos.
¿Y cómo encontramos ese equilibrio perfecto?
Tener claro que lo que queremos para nuestra vida de pareja es la base de estabilidad emocional es ahí donde entra el tipo de relación de pareja que deseas. Para amar, crecer juntos y no morir en el intento, hay que trabajar todos los días la relación, partiendo que de base tenemos claro el bien común que deseamos para los dos, es decir que hay unos intereses comunes en la pareja.
-La comunicación, hablar expresar lo que queremos o deseamos logra una verdadera intimidad en la pareja, plantea tus argumentos de una forma sana sin miedo al rechazo. La incomunicación en la pareja es un síntoma de que la relación no funciona y el día menos pensado todo saldrá en forma de agravio y reproches. Aprovecha una comida relajada, el descanso al llegar la noche, los minutos antes de dormir en la cama para contarle a tu pareja, para hablar y comunicarte, contaos las cosas, aunque sea nada, eso os refuerza y aviva la llama.
-Imagina un futuro común, las parejas sobreviven porque tienen proyectos comunes, se sabe lo que se quiere juntos, y conforme van pasando los años hay que ir aumentando el nivel de compromiso, esto ayuda a afianzar la pareja, (casarse, comprar un hogar, hacer un viaje…) tener un proyecto con un objetivo claro de lo que se quiere en pareja es la base de la estabilidad emocional.
-Huye de la rutina, puede que la tranquilidad y la seguridad de la pareja te de satisfacción, lo que no tiene nada que ver para caer en la monotonía y el aburrimiento, además esta situación se hace crónica sino se trata a tiempo, así es que, ¡atención!, sorprende , hacer cosas distintas, un regalo un día cualquiera, un viaje para dos aunque sea de dos días, hacer el amor de imprevisto pero con ganas en un sitio distinto, hazle una comida diferente a lo que le tienes acostumbrado/a…
-Despierta con alegría, pon música, salta de la cama, baila y cantále una canción, o hacer el amor, luego desayunar como reyes o incluso sal a una terraza a tomar el sol y tomar un buen café en su compañía y despídete siempre con un buen beso y un te quiero, es gratis y da tanto bienestar.
-Aprender algo nuevo juntos, un idioma, clases de salsa, teatro, participar en cosas nuevas y hacerlo juntos, aprendéis, creáis grupo, rompéis la rutina y disfrutáis, que más se puede pedir.
-Ser anfitriones, es vuestro aniversario, cumpleaños o simplemente este día queréis invitar a amigos o familiares, a una buena comida, una tarde de café y pastel o incluso a una cata de vinos, hazlo, tomar este tipo de iniciativa o lleva a estar unidos y activos, mientras organizáis, hacéis la compra, decoráis, y hace la vida más divertida, además de mantener vuestras relaciones de colegas y amigos.
-Cuida los detalles, no todos los días son iguales, navidad, su cumpleaños, vuestro aniversario, y San Valentín para el día de los enamorados queda dos días, no se te vaya a pasar, y si no sabes aún que regalar, sorpréndele con Coaching y disfruta y se testigo de sus mejoras y avances.
Deja un comentario